LOS SERES VIVOS
Un ser vivo u organismo es un conjunto material de organización compleja, en la que intervienen sistemas de comunicación molecular que lo relacionan internamente y con el medio ambiente en un intercambio de materia y energía de una forma ordenada.
Los seres vivos pueden funcionar con autonomía durante toda su existencia . Estos seres están formados por células, en cuyo interior tienen lugar diversas reacciones químicas que las enzimas se encargan de catalizar.
Existen varias características que permiten diferenciar a un ser vivo de aquello que está sometido a la inercia. La organización (a partir de las células, que son sus entidades primordiales), la homeostasis (el equilibrio que existe en su interior), el metabolismo (la conversión de energía en nutrientes), la irritabilidad (respuesta ante estímulos exteriores), la adaptación (las especies vivas evolucionan para adaptarse al ambiente), el desarrollo (incremento de tamaño) y la reproducción (la capacidad de generar copias parecidas del mismo organismo, ya sea sexualmente o asexualmente) son algunas de las propiedades de los seres vivos.
Otros tipos de entidades comparten varias de estas particularidades, pero no todas. Los virus también tienen un alto grado de organización y pueden reproducirse, aunque no cuentan con metabolismo ni se desarrollan.
Los ejemplos más típicos de seres vivos son los seres humanos, los animales (de todo tipo: perros, leones, elefantes, delfines, mosquitos, serpientes, etc). y las plantas. Existen, sin embargo, otros organismos vivos, como los hongos y las bacterias.